Hace varios meses hemos venido escuchando una campaña publicitaria que nos invita a tener los pies en la tierra y a saber cómo actuar en caso que un terremoto nos llegue a afectar. Muchos jóvenes no tienen aún el conocimeinto necesario ni han tenido que afrontar un temblor, terremoto o catástrofe.

Hoy cuando el mundo se une en pos del terremoto que afecta a Haití y de la tragedia que vive este pueblo, son algunos los que recuerdan el ocurrido en Armenia y el eje cafetero en 1999, que destruyó buena parte de los lugares donde fue el epicentro principal.  

Pero la pregunta principal es, ¿está Bogotá preparada para afrontar un desafío o una tragedia de esta índole? Lo que no se sabe es si la constante publicidad es solamente una advertencia o una realidad de lo que pueda pasar.

Pero, ¿por qué ocurren los sismos?

Cuando la energía de deformación que se ha acumulado durante mucho tiempo en la gigantescas masas de roca que conforman la corteza terrestre, se libera súbitamente ocasionando fractura y movimiento realtivo entre las partes. En este proceso se generan ondas sísmicas que se propagan a través de la corteza a grandes distancias.

Este fenómeno se produce principalmente a lo largo de fallas geológicas, que son zonas de debilidad de la corteza, relativamente estrechas, a lo largo de las cuales las masas de roca se deslizan entre sí.

La principal recomendación en caso de ocurrir este tipo de tragedias, es mantener la calma y desalojar el sitio donde se encuentra y llegar a un lugar abierto donde no corra riesgo su vida.

Historia de terremotos en Bogotá

Afortunadamente en la capital del país a través de la historia, los terremotos que han ocurrido no han dejado tagedias muy lamentables. Uno de los primeros que hay recordación fue el ocurrido el viernes 18 de octubre de 1743. El siguiente en la recordación fue el 17 de junio de 1826. El 31 de enero de 1906 ocurrió otro más, al igual que el 29 de agosto de 1917.

Los más recientes fueron el 4 de septiembre de 1966 y el 9 de febrero de 1967.  Hace un poco más de un año un sismo de pequeñas proporciones afectó la ciudad, donde el edificio de la Lotería de Bogotá en la carrera 30 con calle 26 fue uno de los más afectados.