Una de las adicciones que cada día crece en Colombia con índices acelerados y que según el Fondo Nacional de Estupefacientes, está cobrando más vidas, es la adicción a los medicamentos o fármacos.

Esta enfermedad se viene presentando hace varios años en el país, pero no se había diagnosticado como adicción, ya que los índices de consultas por la misma no excedían a los que se presentan por otro tipo de consumos como alcohol y alucinógenos.

Para los expertos de la Fundación La Luz, el centro terapéutico más grande de Colombia, este tipo de comportamientos se da en las personas que no tienen la suficiente información médica y abusan de algunos fármacos. También porque esta clase de medicamentos son demasiado adictivos y causan adicción al mismo.

Entre los más comunes y por los que se han presentado más consultas en las sedes de la Fundación, está el Tramadol, el Rivotril y el Zolpidem, medicamentos que son usados para aliviar el dolor, bajar los niveles de ansiedad y conciliar el sueño respectivamente. El problema se acrecenta cuando las personas abusan de su uso y se vuelven dependientes a estos productos y cada día aumentan la dosis formulada por el médico o simplemente se auto medican.

Algunos de los síntomas que pueden empezar a sentir las personas que suspenden de manera definitiva el consumo de algún tipo de medicamento formulado y al que se ha vuelto adictos, es nerviosismo; pánico; transpiración; dificultad para quedarse o permanecer dormido; secreción nasal, estornudos, o tos; entumecimiento, dolor, ardor u hormigueo en las manos o pies; piel de gallina; escalofríos; náuseas; temblor incontrolable de una parte del cuerpo; diarrea; o raramente, alucinaciones

También desarrollan sentimientos o cambios del estado de ánimo desagradables o síntomas de abstinencia, como: inestabilidad, aturdimiento, calambres musculares, náuseas, vómitos, sudoración, cansancio, llanto incontrolable, nerviosismo, ataques de pánico, dificultad para dormir o para permanecer dormido, temblor incontrolable de una parte del cuerpo y hasta convulsiones.

Entre los medicamentos que son más consumidos y que al abusar de su uso pueden ocasionar dependencia física o sicológica, están:

Los analgésicos para controlar el dolor. Los antidepresivos o tranquilizantes. Los medicamentos para evitar el insomnio. Los relajantes musculares, entre otros.

El llamado que hace la Fundación La Luz, es que antes de consumir cualquier tipo de medicamento, formulado o no, se asesoren por especialistas en el tema ya que las adicciones cada día aumentan en el país y es una enfermedad con la que se lucha cada día desde el Centro Terapeútico.