La ubicación de los pozos subterráneos que abastecerían a Bogotá en caso de una emergencia y los niveles de agua que se pueden extraer de ellos son algunas de las señales de alarma que permiten conocer la necesidad de revisar el proyecto, destacaron los Concejales Humberto Quijano y Carlos Eduardo Guevara. Si no se revisa, puede ser una inversión sin ningún fruto.
En debate llevado a cabo en el Cabildo Distrital, los Concejales de la bancada de Mira, destacaron la importancia de desarrollar un sistema de sbastecimiento de aguas para emergencias en el distrito. Pero la mala ubicación de los pozos del sistema puede llevar a que el proyecto fracase. La baja productividad de los pozos que se construyeron para la fase exploratoria es una de las señales de esta situación.
Bogotá es abastecida por parte del Acueducto con un caudal de 14 m3/s, pero las mediciones hechas en los acuíferos a 300 metros de profundidad, es de 2 m/h. Si este es el nivel a extraer en los 64 pozos que se proyecta construir, el nivel a extraer es de 0.35 m/s, lo cual es muy bajo para abastecer el distrito.
Igualmente, el estudio presentado por JICA para el desarrollo del sistema de emergencias, destaca que los pozos se construirán en la parte alta del acuífero, zona de recarga del mismo y no en la base del acuífero en donde el nivel de agua es mayor.
“¿Por qué se planeó construir los pozos donde el nivel de agua es más bajo?, esta es una inquietud que se debe resolver antes de iniciar el proyecto para que la inversión sea efectiva y no se improvise con el agua de la ciudad” destaca el Concejal Quijano.
“Es importante que participen la academia y demás entidades interesadas en este tipo de proyectos para que el estudio se valide o revise a tiempo y no se cometan errores con un sistema tan importante como el de aguas para emergencias de la ciudad” agregó el cabildante Guevara.
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