Bogotá es una ciudad en construcción. Cientos de frentes de obra, reparación de calles y la III fase de TransMilenio por la calle 26 así lo demuestran.
Estas mejoras en infraestructura vial en la capital generan miles de toneladas de escombros y residuos, que generan problemas de acopio, manejo, disposición y utilización. Sin embargo, a partir de 2012, estos desechos entrarán en cintura, ya que se regulará su tratamiento y aprovechamiento.
Ahora, las empresas constructoras, que desarrollen obras de infraestructura, deberán reutilizar cierto porcentaje de los escombros, ya sean los generados en las etapas constructivas y de desmantelamiento, o los reciclados en los centros de tratamiento y aprovechamiento legalmente constituidos.
Las entidades públicas deberán reutilizar anualmente por lo menos el 10 por ciento del total de metros cuadrados a construir. El porcentaje para las privadas es del 5 por ciento del total de metros cuadrados del proyecto en componentes no estructurales.
Según Juan Antonio Nieto Escalante, Secretario Distrital de Ambiente, el porcentaje de reutilización de escombros aumentará anualmente. “Cada año aumentará cinco unidades porcentuales hasta alcanzar un 25 por ciento. Si la obra agota sus reservas de material y no puede cumplir con los porcentajes, deberá presentar un informe a la SDA antes del inicio de la construcción”.
Además, los sitios destinados a tratamiento y aprovechamiento deberán ser estructurados bajo los lineamientos que fije la SDA para cada uno de ellos y deberán contar con aprobación de la entidad de tal forma que se implementen medidas de manejo para mitigar los posibles impactos ambientales negativos.
Estos lugares podrán ubicarse en áreas con paisaje degradado, como minas y canteras abandonadas, que no presenten riesgos geotécnicos para la población. Estos sitios deberán contribuir a la restauración morfológica y paisajística del lugar, y contar con un concepto técnico favorable de la Secretaría de Ambiente.
Los que no cumplan con lo establecido por la SDA podrían ser sancionados hasta con 5 mil salarios mínimos mensuales legales vigentes. “La SDA busca fomentar procesos de recuperación de los materiales provenientes de los residuos de construcción y demolición, e incluirlos en el ciclo económico para beneficiar al ambiente y al sector productivo a través de la reutilización y el reciclaje.
Además de promover el uso de los centros de aprovechamiento, fijos o móviles, donde se tratarán los residuos de construcción y demolición para crear productos comerciales”, dijo Nieto Escalante.
Obligaciones para frenar los escombros
Los generadores tendrán que tener la información sobre la cantidad de escombros generados y los certificados expedidos por los sitios de tratamiento; presentar y entregar los escombros separados de otros residuos, respetando los parámetros y características definidas por los centros de aprovechamiento.
Por su parte, los transportadores entregarán los escombros recolectados en los sitios autorizados para el tratamiento; en caso de pérdida o derrame de escombros en espacio público, deberán recogerlos inmediatamente, para lo cual tienen que contar con las herramientas y equipos necesarios; y portar el documento que acredite el origen y el destino final de los residuos.
Finalmente, los sitios de tratamiento y aprovechamiento están obligados a demarcar y señalizar las zonas de carga y descarga; llevar un registro de los escombros recibidos y entregar un certificado; no recibir escombros mezclados con residuos ordinarios, líquidos o peligrosos; reportar a la SDA información sobre los registros; hacerse responsables de los impactos causados al ambiente por inadecuado manejo.
Cuando la función publica implica el bienestar general y la incimpetencia determina mediocridades en el desarrollo de politicas publicas, es entonces cuando no se entiende el verdadero liderazgo en as administraciones., y el compromiso de grandes capitales para no salir del problema sino para mantenerlo. Porque no se asume con responsabilidad un asunto que a todas luces es verdaderamente, peligroso para la ciudad y la gente, por encima de los partidos y de los negocios particulares deberá primar el bien común.No mas Doña Juana, tecnología de punta YA.