Terminó la etapa pedagógica de la implementación del Código Nacional de Policía y Convivencia. A partir de este primero de agosto las sanciones impuestas por las autoridades ya serán multas de carácter económico, e irán desde 98.360 hasta 786.880 pesos. Las autoridades explicaron que las infracciones que tendrán sanción económica se dividen según el Nuevo Código de Policía en cuatro tipos.
– Tipo 1: La multa será de 98.360 pesos. Se aplicará a conductas como irrespetar a la policía, arrojar basura en espacio público, empujar o agredir a alguien en el transporte público, invadir con el vehículo motorizado la ciclorruta, obstruir manifestaciones de cariño (que no configuren actos sexuales), entre otros.
– Tipo 2: La multa será de 196.720 pesos. Conductas como el porte de armas blancas en lugares públicos, colarse en el transporte público, pintar grafitis en zonas no autorizadas, ocupar indebidamente el espacio público, pasear con un perro de raza considerada peligrosa sin bozal ni correa, consumir bebidas alcohólicas en sitio públicos, entre otras, serán castigadas con este tipo de multa.
-Tipo 3: La multa será de 393.440 pesos y corresponderá a comportamientos indebidos como sostener relaciones sexuales en público, poner música en un establecimiento comercial sin pagar derechos de autor, consumir bebidas alcohólicas en un establecimiento educativo, poner música en alto volumen en zonas donde no está permitido y agredir físicamente a cualquier persona.
-Tipo 4: La multa será de 786.880 pesos y se impondrá por vender cigarrillos o licores a menores de edad, irrespetar manifestaciones públicas por razones culturales o religiosas, agredir físicamente a un policía, fabricar o manipular pólvora, hacer conexiones no autorizadas de servicios públicos, ejercer la prostitución en espacios no autorizados, orinar en espacio público, agredir físicamente a un policía o arrendar un inmueble para un uso no autorizado en el sector.
¿Faltó pedagogía?
El concejal Jorge Torres consideró que resulta lamentable que en estos seis meses que se destinaron para la pedagogía, el esfuerzo del gobierno nacional no se hubiese concentrado en que los colombianos conociesen la norma. “Se debe hacer mayor énfasis en ayudar a que la ciudadanía comprenda la esencia del Código y no en las multas para lograr un mayor cumplimiento voluntario de ellas”.
Pese a ello el concejal Torres destaca el nuevo Código como herramienta para la sana convivencia porque conduce a las personas casi que de manera intuitiva al principio de que las ciudades estén aseadas y “por lo mismo que un comportamiento contrario como botar basura, arrojar llantas usadas o escombros en la calle, evidentemente no se puede realizar sin que específicamente todo esté consignado en la norma”.
Por último, Jorge Torres hizo un llamado a ver al nuevo Código como una oportunidad de cambio cultural para solucionar los problemas de manera pacífica y que los colombianos cumplan las normas básicas de convivencia de manera voluntaria y no por miedo a la sanción legal.
Foto: Vanguardia Liberal
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