Desde el 4 de abril y hasta el 19 de mayo estará abierta la exposición «Leo Matiz mirando el infinito» en el Museo Nacional de Colombia. La muestra la componen 127 fotografías de uno de los fotógrafos más importantes del país y cuenta con el apoyo de la Fundación Leo Matiz y la curaduría de Ernesto Peñalosa de la UNAN de México.
Además, en la inauguración se hará el lanzamiento del documental «Leo Matiz» de Diego Samper, acompañado en vivo por «Toño» Arnedo. Junto a la exposición de Leo Matiz se presentarán algunas de las películas en las que él hizo la foto fija como son: «La Devoradora» con María Félix, gracias a Diana Internacional Films, S.A., de C.V. y «La Virgen que forjó una patria» y «Hay que tiempos señor don Simón», estas dos últimas gracias a Televisa y la Fundación Televisa.
«La extraordinaria sensibilidad social y la precoz maestría técnica con la cámara, convirtieron a Leo Matiz en el cronista visual de las urbes latinoamericanas durante un largo tramo del siglo XX, teniendo como punto de partida el realismo social y derivando después hacia la experimentación surrealista y geométrica».
En la muestra se desarrollan varios aspectos temáticos que abarcan fotografías de la cultura urbana, el agua, la tierra y el mundo rural, el arte y el entretenimiento, los retratos de celebridades del siglo XX, al igual que imágenes experimentales, vanguardistas y surrealistas que revelan las diversas búsquedas expresivas de Leo Matiz y su esfuerzo por transformar los códigos visuales establecidos, logrando inolvidables composiciones realistas y geométricas que escapan a nuestra mirada habitual sobre los seres y las cosas.
La exposición, concebida por el Museo Nacional y la Fundación Leo Matiz como un amplio y versátil caleidoscopio sobre la obra fotográfica de Matiz, está conformada en su gran mayoría por ampliaciones originales hechas por el artista. Su hilo conductor busca mostrar la consolidación de los estilos y concepciones estéticas que dominaron el trabajo visual de Matiz, “a caballo entre la renovación del foto periodismo internacional y la tradición moderna, vinculada a las vanguardias artísticas”, según lo definió Ernesto Peñaloza, su curador.
La exhibición tiene alusión a una reflexión del fotógrafo, que se consideraba destinado a las tragedias. “Me he salvado de los huracanes, de los volcanes nacientes, de los ríos que se salen de su curso, de los atentados. Pero yo no puedo dormir. He venido a ver el infinito”, confesó alguna vez.
Fotos: Fundación Leo Matiz
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