Cuando de fabricar juguetes en madera para niños se trata, uno de los pioneros en el país es un alemán refugiado en Colombia desde la Segunda Guerra Mundial. En su taller en la zona industrial de La Floresta, Horst Damme llevá más de 60 años fabricando la diversión preferida de los niños. Su especialidad son los caballos en madera de los cuales uno reposa encima de su escritorio principal.
Horst Damme nació el 13 de octubre de 1929 en Alemania. Como Willy Damme, su padre era miembro de Partido Social-Demócrata, un movimiento opositor al dictador Adolfo Hitler, su familia fue constantemente perseguida. Por ese motivo la familia Damme no tuvo más que buscar refugio en Checoslovaquia y divagar por el mundo hasta que llegó a Bogotá donde se instaló definitivamente.
Por todo ese aporte a la cultura del juguete, la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte y el Instituto Distrital de Patrimonio le están rindiendo un mercido homenaje, durante este mes y se prolongará hasta los primeros días de 2010.
Este talentoso artesano ha construido en su fábrica innumerables piezas de juguetería que han terminado en los estantes de niñas y niños que se han divertido con estas piezas consideradas hoy, luego de 60 años, patrimonio cultural de la ciudad. Algunas de sus creaciones se exhibirán hasta el 10 de enero en el Museo de Bogotá- Sede Casa Sámano en la carrera 4 # 10-18 hasta el 15 de enero.
Hace 31 años quedó ciego en un accidente en su fábrica y no ha parado de trabajar. Hoy a sus 80 años de edad, vive feliz en su taller al lado de su esposa Yolanda y algunas de sus hijas con quienes comparte los gratos momentos de hacer feliz a un niño.
Foto: Reuters – Daniel Muñoz
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