La Secretaria de Salud presentará ante el Comité Distrital de Emergencias un plan de intervención del transporte masivo Transmilenio, para evitar que este sistema se convierta en un foco de retransmisión del virus AH1N1 y entre las medidas, la secretaría de Salud anunció que se fortalecerán las campañas de prevención contra el virus AH1N1.

Con el propósito de intensificar los controles por la gripe A, en los principales portales y estaciones de Transmilenio se repartirá jabón antiséptico y se harán campañas para enseñar a las personas cómo lavarse las manos y la importancia de hacerlo para evitar una propagación de la influenza; dado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció la semana pasada un segundo pico del virus.

Las campañas de divulgación masiva de lo que significa el virus se intensificará en el transporte masivo de la capital del país. El ente de control de Salud Distrital espera informar adecuada y oportunamente de los cuadros sintomáticos para que la gente valore y entienda la importancia de los cuidados preventivos.

En los portales de Transmilenio va a haber un personal o unos dispensadores para fortalecer lavado de manos con gel antiséptico», explicó el Secretario de Salud Héctor Zambrano.

El funcionario agregó que a más tardar en un mes llegara a Bogotá el pico epidemiológico por influenza, por lo que se adelanta labores en la red hospitalaria del distrito para trabajar en diagnostico oportuno y suministrar el tratamiento adecuado cuando la gravedad clínica así lo indique, con el fin de reducir a la mínima expresión la mortalidad del nuevo virus.

Se entregarán folletos y se brindará información relacionada con el virus AH1N1. El secretario de Salud, Héctor Zambrano, dijo que con esta medida se espera controlar la propagación de la influenza. Así mismo, en algunas estaciones se repartirán tapabocas y se explicará cómo usarlo adecuadamente.

En varios países del mundo se ha optado por la opción del gel antiséptico y se ha sugerido que el personal de los servicios hospitalarios mantenga las manos alejadas de la cara, que se cambien los guantes si se rompen o se contaminan. Además, que se aseen las manos después de cada procedimiento (atención al paciente). Según los estudios de la OMS estas medidas hacen que el riesgo de contagio de la enfermedad se reduzca de 1 000 a uno.