Los desaciertos y retos para la movilidad en Bogotá, con la implementación del Sistema Integrado de Transporte Público, SITP, cuyo objetivo principal era dignificar el sistema de transporte en la capital del país; fue el tema central del Concejo de Bogotá, en su sesión Plenaria.
La participaron no fue exclusiva de los concejales, sino usuarios y conductores del sistema, pequeños transportadores, y varios damnificados con la implementación del Sistema masivo.
El concejal Jairo Cardozo, señaló que entre los puntos negros más evidentes en la prestación del servicio están las discusiones entre pasajeros y conductores; insuficientes puntos de recarga de la tarjeta, rutas con largos intervalos de tiempo, lo que conlleva a afectar al adulto mayor, niños y discapacitados y el consiguiente retraso en las actividades de los usuarios.
El concejal propone designar por parte del Concejo de Bogotá, una Comisión Accidental, que se encargue de evaluar y articular las soluciones y propuestas al conflicto social, además de llevar a cabo un verdadero ajuste estructural, incluyente e integral del transporte público, lo que se llevaría a cabo bajo el escenario de una nueva Administración en Bogotá.
Por su parte, los usuarios participantes señalaron que es necesario mejorar la calidad en la prestación del servicio, que incluye disminuir los tiempos de desplazamiento, resolver los problemas de sobrecupo, bajar las tarifas, prevenir los abusos en contra de las mujeres y garantizar la seguridad de los usuarios.
Otra conclusión fue que los conductores deben ser objeto de especial atención, para aquellos que no pueden ser integrados a los nuevos modelos, diseñarse alternativas que disminuyan este impacto negativo en la sociedad, facilitándoles opciones productivas y de capacitación.
En este mismo sentido, se señaló que se debe pensar en los pequeños transportadores ya que, como quiera que la democratización y la inclusión que se buscó no fue exitosa, la Administración debe gestionar prontamente los vehículos al precio real.
Por su parte, los propietarios vinculados al SITP señalaron que se ha presentado un atraso hasta de 22 meses en el pago de rentas; que faltó socialización y participación en la construcción de los planes de salvamento y que hay una imposibilidad de vender los vehículos a otros operadores.
Los pequeños operadores, que son damnificados, señalaron que para vender los vehículos, deben arreglarlos e incurren en gastos que llegan a los 10 millones de pesos y traspasar la titularidad del vehículo antes de recibir el pago. Aparte de lo anterior, a quienes optaron por la modalidad de renta y quieran ahora salir del negocio, les pagan los vehículos a precio de renta y no de venta (aproximadamente $35 millones menos).
El pasado lunes 1 de junio comenzó la recta final de implementación del Sistema Integrado de Transporte Público de Bogotá, que según el alcalde Gustavo Petro, deberá estar finalizada el próximo 15 de diciembre. Actualmente el proceso alcanza un 70 por ciento. La prestación del servicio de cerca de 5 mil buses tradicionales continúa bajo la planeación de Transmilenio; y el único cambio es que los buses y colectivos tradicionales, tienen un aviso lateral que dice SITP Provisional.
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