El piloto bogotano Carlos Muñoz ocupó el segundo lugar en la edición 97 de las 500 Millas de Indianápolis, en una espectacular carrera que estuvo a punto de adjudicarse, pero se la llevó el brasilero Tony Kanaan.
Muñoz, fue el mejor novato, el mejor latino y el mejor de su equipo, el Andretti Motorsport, destacándose de principio a fin puesto que manejó el tráfico, se mantuvo siempre en las primeras posiciones, y llegó a liderar en tres ocasiones.
En la última re largada, faltando 4 vueltas para las 200 pactadas, Kanaan toma la punta de carrera con Muñoz como escolta y en la parte de atrás del grupo se accidenta el ganador del año anterior Dario Franchitti, ocasionando una nueva bandera amarilla que ya cerraría el final impidiendo que Muñoz lograra el último sobrepaso, algo que muy seguramente hubiera podido conseguir por la forma como rodaba su auto.
Muñoz hace algún tiempo tenía poca figuración, pero hace varios meses ha logrado mantener una excelente regularidad, tanto que el domingo estuvo muy cerca de igualar a Juan Pablo Montoya, quien ha sido hasta el momento el único piloto de nuestro país que se ha quedado con esta carrera.
El piloto colombiano sorprendió a los mejores pilotos de la categoría IndyCar y desde la IndyLights llegó para ser segundo de las míticas 500 millas de Indianápolis. La carrera terminó con una bandera amarilla, pero 3 vueltas antes una impresionante maniobra de Kannan, el ganador y del colombiano Muñoz cambiaron las posiciones de punta.
Carlos Muñoz fue el mejor de los novatos en la competencia y aseguró que desde ya se prepara para volver el próximo año y lograr la hazaña que hace unos años logró Montoya. Carlos Muñoz hace para del equipo Andretti AutoSport, propiedad del ex corredor de carros Michael Andretti. Ed Carpenter y Mario Andretti son sus compañeros de equipo.
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