Por estos días muchos bogotanos hacen fila frente a las registradurías del distrito para obtener su nuevo documento de identidad ya que hasta el 31 de diciembre hay plazo para la renovación de la misma. Recientemente la entidad presentó los servicios que ofrece de cruces de información y consulta de su base de datos biométrica, los cuales permiten impedir suplantaciones en el sector salud, la banca, las telecomunicaciones, los seguros y en todos los campos en los que existe el riesgo de fraude por suplantación de personas.

El próximo 31 de diciembre concluye la ejecución del contrato suscrito con la empresa Consorcio Sagem para la implementación del programa de modernización tecnológica de la entidad. En el marco de este proyecto se dotó a la Registraduría de la infraestructura tecnológica necesaria en materia de hardware y software, la ampliación a 45 millones de registros de la base de datos automatizada de identificación dactilar AFIS, la digitalización y conversión al sistema AFIS de los archivos físicos decadactilares, la captura de la información biográfica y la reseña dactilar de los ciudadanos, entre otros.

En el contrato para la implementación del proyecto de modernización se estableció, que la utilización y explotación económica de la lectura de la información del código de barras del documento de identidad por medio de equipos lectores, será realizada, autorizada y regulada de manera exclusiva por la Registraduría.

Sagem transferirá la propiedad del decodificador del código de barras y de la firma digital, incluida en los documentos de identificación, a la entidad para que la información del código de barras incorporado en los documentos de identidad y de la firma digital incluida en dicho código, puedan ser leídos e interpretados.

Este nuevo servicio se suma a los cruces de información con el Archivo Nacional de Identificación que ofrece la Registraduría Nacional del Estado Civil y cuya tarifa oscila entre 400 y  mil 400 pesos por cada consulta, dependiendo del volumen y el medio utilizado.