Con el apoyo de los exhibidores un hecho histórico en el proceso de la distribución del cine en Colombia sucederá esta semana. El jueves 23 de agosto, de 8:00 P.M. a 10:00 PM, por streaming vía internet, se realizará la primera premier on line de una película que entra en cartelera.

Toda Colombia podrá ver gratuitamente la película colombiana La Sirga. Para adquirir sus invitaciones a esta premier, el proceso es muy sencillo, ingresan a www.peliculalasirga.com, allí encontrarán en el home un enlace para solicitar su pase de ingreso, con solo llenar unos datos mínimos, e inmediatamente recibirá un correo electrónico con el enlace que le permitirá ver la película en el día y la hora indicada. La sala de cine es su casa, y podrá compartir con los otros invitados gracias a las redes sociales de la película, que todo el tiempo estarán conectada en función de la premier.

Al otro día, el viernes 24 de agosto, La Sirga será estrenada en las salas de cine de las principales ciudades de Colombia. Los creadores de esta producción, quieren romper con los paradigmas de la distribución cinematográfica, donde el cine que va más allá del entretenimiento es estrenado bajo condiciones que sólo le permiten llegar a una inmensa minoría. El deseo del director y los productores de es lograr que gracias a esta premier on line, gratuita, los colombianos se arriesguen a ver otro tipo de cine y dejen su miedo.

Según el productor Oscar Ruiz Navia, «Presentar La Sirga on line, en simultánea con el estreno en salas, realmente es una iniciativa muy novedosa y, sobretodo, muy acorde a nuestros tiempos en los que la red, ese especie de «mundo platónico», ha cobrado completa importancia en nuestro diario vivir. Por eso estamos seguros que todas las personas que la vean serán excelentes replicadores de esta propuesta creándose un boca a boca que aumentará el número de espectadores en los cines. Esta es una película concebida para la gente, porque la gente necesita que haya una oferta más amplia de películas, cada vez más cine, más exploración, más conocimiento, más infinidad de sentimientos, universos y matices.

En palabras de Diana Bustamante, quien apoya La Sirga, «Hacer una película es un gran aventura. Hacer una película en Colombia es una aventura extrema, pero si a eso se le suma, que sea opera prima, que se rueda en lugares donde normalmente no se rueda y que además, le apostamos a un cine propositivo que no le teme a casi nada, y que solo quiere ser honesto, pues ahí estamos ya hablando de un deporte extremo.

El culmen de ese deporte, la medalla de oro, nos la jugamos llegado el momento de exhibir esta clase de películas, para las cuales, dadas las reglas del mercado de la exhibición comercial, hay muy pocos espacios para su exhibición y entramos a jugar unas olimpiadas entre «Batman» con su mega pulmón financiero y las películas independientes como «La Sirga», con grandes virtudes pero con poco espacio y limitados recursos para moverse. En esas condiciones, el cine, en particular este cine en el que creemos, al que dedicamos todas nuestras energías, requiere sacudirse, renovarse y perder el temor. El temor a lo nuevo, a lo atrevido, a sí mismo.

La Sirga ha sido una película que parte de la honestidad, de contar una historia delicada y honesta, con una mirada particular sobre lo que nos pasa en este país, así que decidimos, en medio de un panorama que es, en buena medida, rudo con nuestras expresiones más delicadas, ser rudos con nuestras estrategias, decidimos tomar una película que los circuitos tradicionales de exhibición llaman «de poco público» y llevarla a todo el público, en una premier, en un evento, en un único momento que compartiremos con el público colombiano por primera vez, haciendo uso de las nuevas plataformas a las que cada vez más gente tiene acceso.

Con internet nos encontramos en un mundo donde ya no hay más de 500 pantallas de cine en Colombia, hay millones, en las casas, oficinas, en cada uno de los dispositivos móviles y claro, la experiencia de ir cine, jamás desaparecerá y será un placer elevado para todos los que asistimos a ese salón oscuro en el ritual de encontrarnos con las historias mas alucinantes del mundo en hora y media de narración… ese ritual persistirá y será cada vez valioso, pero así mismo, usar las nuevas tecnologías para democratizar el acceso al cine y a la cultura en general, creemos que es también deber de nuestra generación de creadores». Junto a los productores se encuentran sumados a este proyecto, los exhibidores que han dado su bendición ante la propuesta.